noviembre 13, 2008

eSTOICO

ESTOICO.

Todos aprenden alguna vez; como el pez, como los sonidos más estridentes… y pedimos perdón!
Todos alguna vez, escuchamos las sórdidas notas de cualquier canción… y jamás la vimos partir!
Con campanas sonando, en mis agrietados oídos, en mi época dorada… y no pudimos hablar!
Entre ventanas; veo siluetas amorfas, detalles verdes entre flores colores y sabores… y nunca los pude sentir!
Mi piel picoteada por tanto y tanto perverso; entre los velos de los que ya no están en este cuarto de cuatro paredes y un poco de humedad; son telarañas y nahuales, con polvo y amigos y ahora… los pretendo alcanzar!
Creo estar bien; ansío estar bien, aunque todo esto parece estar vació y a mi alrededor; libélulas, mariposas, luciérnagas, y todos tus mares enredados… y naufrague!
Y naufrague… y en verdad lo siento en mi mente; como los demonios de adentro de mi… y quise ser!
Alfombras entre cortadas, con hilos sueltos cosquillean arremolinados entre manos, entre sombras. Con ciruelos en flor y nieve de sabores diversos… y es posible que lo pierda!
Aunque jamás tuve el poder de estar debajo de tus senos partidos admirando la verdad; creo que aún soy de este planeta… aunque sea causa perdida.
Lloran y piden brazos los seres amputados; lamen heridas y nunca duermen, recorren paseos eternos, recorren parques, recorren almas y vida y corazones a distancia… y nunca miran a los ojos!
Acarician el manto eterno; como las cobijas de los ancestros, como las plumas y las pieles de otras almas sin olor… y jamás gritaran!
Veo árboles de dimensiones estratosféricas; en la distancia puedo oír el ruido de tus manos acariciando los libros que he dejado impresos en tus retinas; con manos de pétalos, con cuerpos de plantas sin espinas, sin defensa, sin sabia, sin vida… y aún estoy aquí!
Corro entre piernas largas, entre jardines inmensos, entre rocas, pequeñas, grandes… y sigo descalzo!
Quiero ver todos los amaneceres entre tu pecho, aquí; acostados en esta cama confortable, en las almohadas con fundas que tu misma confeccionaste… y espero soñar!
Ya casi son las diez y aún no contestas mis súplicas, cuando corra será demasiado tarde, entre tus lágrimas de arrepentimiento con olor a olvido, con sabor a mi sangre… y regresare a ti!
Son muchos los traspiés, son muchos los menoscabos, pero mi cuerpo no lo puede enfrentar entre partículas de ti… y simularás estar bien!
Cuantos años espere por estar así, cuanto tiempo paso para que no pasara nada, cuanto más se puede resistir… y te dibujas sardónica!
Estoy ahíto de sentir todo el peso, en la parte más débil de mi espalda; ahíto de que me hagas falta, de no encontrar tu cara en la cama que juntos hicimos nuestra… y parece no incumbirte nada.
Espero al fin esperar algo en ti, espero que esperes lo mismo, que nuestras líneas ven vayan hacia un mismo sendero, para hurgar entre nuestros seres… y jamás me arrepentiré!
Con todo el corazón, con toda la vida, algún día estaremos bien y en paz… solo faltas tú!



cRAMASZO, 04